jueves, 23 de enero de 2020

Año Nuevo Lunar

Últimamente me he fijado mucho en la inquietud que parece tener el género humano por renovarse cada cierto tiempo. O puede que sea algo inculcado por la madre naturaleza. El caso es que tenemos muchas oportunidades a lo largo del año para empezar de cero, consideradas desde antiguo como períodos casi "mágicos", como lo solsticios y equinóceos, fin de año, Halloween, hogueras de san Juan, o celebraciones ya no tan paganas, como la Cuaresma cristiana. Y en astrología, también se considera como renovación el retorno solar (nuestro cumpleaños), el "nuevo año zodíacal" (cuando el sol entra en Aries, el primer signo del zodíaco) y cada luna nueva.

Me da la sensación de que algunos de estos hitos anuales pueden ser incluso considerados "modas". Ya lo llevaba intuyendo desde hace bastante tiempo, pero la pista me la ha dado hoy la aplicación de diseño online que manejo, una muy sencilla, que ofrece plantillas prediseñadas que puedes modificar a tu antojo. Pues bien, hoy mismo tienen todo un apartado de plantillas dedicado exclusivamente al "Año Nuevo Lunar", también relacionado con el"Año Nuevo Chino". Sin embargo, yo no estoy utilizando la versión asiática de la aplicación, sino que esas plantillas van dirigidas a occidentales que desean felicitar o celebrar el Año Nuevo Lunar.

Me sorprende mucho que cada vez más personas de todas las edades se ven en la auténtica necesidad de renovarse a sí mismos, incluso tomando prestadas celebraciones de otras culturas, o recuperando celebraciones paganas antiguas que la iglesia cristianizó. La razón creo que es que, vivimos en una sociedad tan tóxica, tan extremadamente llena de interferencias, interrupciones, presiones y estrés, que cada poco tiempo, necesitamos parar y echar la vista atrás para ver qué es lo que estamos haciendo con nuestra vida. Y no me extraña. Siento que el ritmo de vida que llevamos en occidente no es natural, de hecho, lo es cada vez menos, siempre pegados a algún dispositivo electrónico (móvil, ordenador, televisión, relojes inteligentes, etc) que controlamos y que de alguna manera también nos controla. 

Por lo tanto, en el momento en que podemos adueñarnos de algo que nos permita empezar de cero, lo cazamos al vuelo, sea o no algo de nuestra propia cultura, como una manera de purificarse y desintoxicarse. Vivimos quizá extremadamente preocupados por dar lo mejor de nosotros mismos y afligidos ante la idea de fracasar o agobiados por nuestros tangibles fracasos personales, por lo que el nivel de exigencia se dispara, creándonos un estrés emocional difícil de manejar. Quizá en algunos momentos nos sobra autoindulgencia y, en otros, nos hace mucha falta algo de consideración con nosotros mismos.

En cualquier caso, mañana día 24 de Enero, a las 22:42 h tendrá lugar la primera Luna Nueva del año 2020. Ya será decisión de cada uno si va a suponer otro pequeño renacer personal o no.

¡Nos vemos en el próximo té!